desnudo, apenas rozarte.
Mi mirada de frente a la tuya,
mis labios húmedos junto a los tuyos,
mi pecho que late junto a tu pecho,
mis manos empalmadas con las tuyas,
mi vientre apenas con el tuyo.
Cerrar los ojos, recorrernos
suavemente, sin prisa.
Sentir cómo se va agitando
nuestra respiración,
cómo se van acelerando
nuestras pulsaciones,
sin perder la calma,
disfrutando cada instante.
Y, lentamente, meterte adentro...
de mi ojos, de mi boca, de mi pecho,
de mis manos, de mi vientre.
Así será, invento mío, realidad.
EMOTANGO